miércoles, 5 de marzo de 2014

Capítulo 13 Las imágenes mentales


Las imágenes mentales

Muchos pacientes experimentan pensamientos automáticos  en forma de palabras expresadas en su mente si no también lo hacen en forma de fotografías mentales o imágenes. Las imágenes suelen ser muy breves y perturbadoras muchos pacientes las apartan  rápidamente de su mente, pero si no logran combatirlas  pueden sentir sus efectos negativos de manera permanente.
Identificación de imágenes
El terapeuta trata de descubrir  una imagen mental espontanea para ayudar a los pacientes a reconocer las imágenes mentales o de inducir una en la sesión.

Instruir  a el paciente acerca de las imágenes mentales
Es importante instruir a el paciente  respecto de las imágenes que suele contribuir a la reducción de la angustia y torna más probable la identificación de ellas, el terapeuta manifiesta  a la paciente que ella aprenderá a combatir las imágenes de lo cual se puede inferir que lograra controlar sus tensiones.
Si el paciente sigue experimentando dificultades para identificar imágenes espontaneas, el terapeuta puede inducir una imagen relacionada con una situación menos amenazante.


Comprobar la realidad de la imagen
En estos casos el terapeuta enseña al paciente a tratar la imagen como si fuese un o un pensamiento automático verbal usando el cuestionamiento socrático estándar. Cuando se trata  de imágenes es preferible utilizar las técnicas específicas más que en las técnicas verbales.

Repetir la imagen
Las técnicas de la repetición se suele utilizar cuando un paciente imagina claramente un desenlace exagerado, pero catastrófico para sus imágenes. El terapeuta le sugiere entonces que se represente  una y otra vez la imagen en cuestión.

Reducción de la amenaza percibida

Un tercer tipo de imagen inducida es la que el paciente  le permite efectuar una mejor evaluación de una situación amenazante. La mayoría de los pacientes experimentan pensamientos automáticos bajo la forma de imágenes espontáneas. A menudo se requiere de un interrogatorio permanente. Los pacientes que tienen frecuentes imágenes perturbadoras  se benefician con la práctica  regular de varias técnicas de imaginería.

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